El exalcalde de Bogotá no pierde ninguna ocasión para exaltar a Transmilenio y lo que ha significado para la movilidad de la capital, pese a las quejas de la ciudadanía con el servicio.
Uno de los rumores que más ha sonado en Bogotá y en todo el país en los últimos años es que el exalcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, es uno de los propietarios de la empresa de transporte masivo Transmilenio, razón por la que ha sido calificado por algunas personas como “un vendedor de buses” y no como un político, a lo que finalmente el exfuncionario respondió.
Saliendole al paso a los rumores y a las acusaciones en su contra, Peñalosa respondió de manera contundente con un “no” sobre si es propietario de la empresa o si es un accionista. No obstante, habiéndose desmarcado de quienes lo vinculan como un dueño del sistema, si aprovechó para defender el servicio que se creó durante su primera alcaldía.
“Eso es completamente ridículo. Yo me siento muy orgulloso de haber creado Transmilenio y yo creería que no hay ninguna exportación de tecnología tan importante en Colombia, en la historia, como Transmilenio”, señaló el exalcalde en entrevista con un medio digital del país sobre su experiencia y planes a futuro en la política.
Pero sus declaraciones no quedaron ahí, pues consideró los rumores sobre si vendía buses como “estupideces”, a lo que agregó además la forma en como en Medellín la gente tiene un sentido de pertenencia distinto y que si Transmilenio hubiese sido un proyecto de esa ciudad la percepción sería distinta.
“También otras estupideces han salido a decir: que es que vendía buses. Jamás he vendido un bus, ni he trabajado con ninguna empresa que haya vendido un bus. Si Transmilenio se hubiera hecho en Medellín, estarían orgullosos; pero en Bogotá, desafortunadamente, no ha sido así”, concluyó Peñalosa.
