El senador de la Colombia Humana se manifestó sobre el aumento de casi 2 millones de pesos a los congresistas, rechazando la medida y explicando lo injusta que es.
Desde su llegada al Congreso de la República, el senador y escritor Gustavo Bolivar ha rechazado el valor que ganan los congresistas al mes, considerando que es una suma injusta e irrespetuosa con los trabajadores colombianos. No es de sorprender que el parlamentario se haya manifestado en contra del aumento, por lo que rápidamente aseguró que rechazará el dinero adicional que recibirá a partir del 2021.
En entrevista con La W Radio, Bolívar contó cómo recibió la noticia, calificandola como una “aberración”,pues cada congresista del país devenga una suma superior a los 100 millones de pesos, señalando que la gran mayoría “no trabaja” y que el aumento de salario se da en la peor época posible debido a la pobreza que abunda en el país a raíz del impacto de la pandemia y de los desastres naturales en algunas zonas.
“Nosotros trabajamos 8 meses al año, descansamos un mes, nos lo pagan; está bien, un mes de vacaciones está bien, y después trabajamos de julio a diciembre; nos vamos 3 meses a vacaciones y también nos las pagan. Es decir, más la prima que tenemos, nosotros cobramos 13 meses de sueldo y trabajamos 8. […] Hoy estamos en vacaciones hasta marzo, y devengamos más de 100 millones de pesos por esos 3 meses sin ir al Congreso y sin trabajar”, comentó el senador.
Yendo más allá con su declaración, Bolívar insistió en lo poco que trabajan los parlamentarios, afirmando que aunque cada senador y representante a la Cámara del país cobre 40 veces más de lo que gana cualquier trabajador colombiano promedio, estos solo trabajan 8 días al mes, por lo que insiste en la aprobación de una medida para reducir salarios.
Bolívar terminó la entrevista hablando de las declaraciones del expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien hace días aseguró que ningún congresista del Centro Democrático aceptaría el dinero adicionado a su salario; Bolívar trató de cínicos a todos los uribistas, recordando que durante el debate sobre la eliminación de los 14 millones que gana cada parlamentario por gastos de representación, fue el uribismo el que tumbó el proyecto.