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“Ábrase de ahí”; el aviso de un taxista a su compañero momentos antes de ser asesinado

En un caso de intolerancia a manos de la delincuencia, un hombre murió en la ciudad de Bogotá, dejando registro de sus últimos momentos de vida por medio de audios de Whatsapp.

La delincuencia en el país sigue dejando víctimas mortales. El último caso que se conoce ocurrió en el barrio Juan Pablo II de la localidad de Ciudad Bolívar, en Bogotá, donde las autoridades encontraron audios de las últimas palabras de la víctima, dejando ver como fue increpado por los delincuentes y que incluso alcanzó a ser avisado pero ya era muy tarde.

Según información compartida por Blu Radio sobre lo ocurrido, el hombre dejó una serie de audios en los que narró los momentos de angustia que vivió. La emisora incluso compartió dichos audios, en los que se escucha la advertencia de un colega al conductor, identificado como Jhon Fredy Quiceno López, quien llevaba 3 años conduciendo taxi en la capital.

El medio radial aseguró que Quiceno López fue contactado a través de la aplicación Taxis Libres para recoger a un supuesto pasajero en el barrio Juan Pablo II, y que tenía como destino el Aeropuerto Internacional El Dorado, pero que el lugar de la carrera más la experiencia de otros conductores hicieron sospechar sobre lo que podría ocurrir.

Finalmente, aquella carrera terminó siendo una trampa para robarl al conductor y a pesar de la advertencia de otro taxista y de que sintió que algo raro pasaba, accedió entrar a una zona peligrosa en el barrio al sur de Bogotá, producto de la necesidad por trabajar y conseguir el dinero que le representaba esa carrera.

“No sé qué hacer, hay un man que dice que entre, que la mamá, que entre al parqueadero por la de debajo de Juan Pablo, no sé qué hacer”, cuenta el taxista asesinado en uno de los audios que fueron difundidos.

La respuesta de uno de sus colegas fue contundente al decirle que no tenía porque entrar a ese lugar y que corría peligro. “Eso es un atracadero, a mí el otro día me la hicieron. No vaya a entrar, ábrase de ahí. Si el asesor lo llama, diga que eso es una olla, un callejón sin salida. Sálgase de ahí. Usted si es bruto, para qué se mete, deje de ser tan hambriento”, afirmó otro taxista que intentó hacer que Quiceno López no fuera hasta el lugar.

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