El exmandatario perdió la compostura ante la gente y no logró soportar los gritos de miles de manizalitas que pedían su salida de la ciudad.
El expresidente Álvaro Uribe Vélez continúa cosechando fracasos y momentos de tensión en lo que va de sus visitas en todo el país, las cuales son por motivo de apoyo a candidatos del Centro Democrático que estarán como opción para las elecciones al Congreso que se realizarán este año y que desde ya adelantan campaña.
Tan solo la semana pasada, el expresidente fue recibido de forma hostil en la Costa Atlántica, y en las últimas horas pasó lo mismo cuando estaba haciendo campaña en Manizales. El exmandatario se encontraba repartiendo volantes en un sector comercial y se disponía a subirse a su camioneta blindada para retirarse del lugar.
Como es habitual en este tipo de situaciones, el exsenador y líder natural del Centro Democrático, estuvo rodeado por un férreo esquema de seguridad que garantizó que en ningún momento corriera peligro, así como de la compañía de personas que sí lo estiman y querían rodearlo en su recorrido por la zona.
Sin embargo, de un momento a otro una multitud de personas le gritó todo tipo de insultos al expresidente, los manizaleños se unieron para gritarle al exmandatario: “Fuera, fuera, fuera”, para luego escalar en gritos de “asesino” y otras fuertes acusaciones que rápidamente hicieron que Uribe perdiera la compostura ante los asistentes.
El expresidente no soportó esa situación, a tal punto que, de la rabia que sufrió ante la ciudadanía que iba en su contra, se quitó el tapabocas y empezó a gritar varias frases que no pudieron ser bien escuchadas debido a la algarabía de la gente, que al final se impuso ante los defensores de Uribe.
El hecho ha llamado la atención de muchas personas, ya que aunque el exmandatario es una persona con un temperamento fuerte, casi nunca se le vio perder la compostura en este tipo de casos.