Con 27 años, Juan Carlos Gálvez se tuvo que despedir del mundo tras haber sido asesinado en la calle en su primer día de trabajo.
Un lamentable suceso generó indignación en Colombia recientemente, el trágico homicidio de Juan Carlos Gálvez, un joven de 27 años que, en su afán de poder proveer a su familia, fue asesinado mientras trabajaba como domiciliario.
Gálvez, quien era el mayor de sus cuatro hermanos, se había graduado recientemente de Técnico en Gestión hotelera del Sena, sin embargo, había pasado mucho tiempo como desempleado, por lo que decidió buscar trabajo como domiciliario en un restaurante del sector de Ciudad Jardín Sur, en Antonio Nariño, en la ciudad de Bogotá.
Según comentó su hermano Kevin de 22 años, quien también trabaja en el mismo restaurante, Juan Carlos decidió buscar al trabajo para distraerse y “hacer algo productivo”, explicando que desde que arrancó la cuarentena en el país, y la crisis económica generada por la misma, fueron algunos de los factores para que su hermano decidiera entrar a trabajar como domiciliario pese.
“Eran las 8, le marqué para ver cómo estaba y si ya iba a salir para que nos viéramos, para irnos a la casa los dos. Él tenía sus audífonos y me dijo: ‘Espere, negro, entrego el pedido, ¿quiere escuchar?’. Le dije que sí, entregó el pedido, como de 70.000 pesos, se despidió del señor y fue cuando escuché: ‘¿Qué hubo piro**?, bájese del celular’ ”, narró su hermano Kevin.
En el ataque efectuado por un par de atracadores que se movilizaban en una moto, Juan Carlos resultó siendo apuñalando. Al llegar al centro asistencial, los doctores le dijeron a Kevin que las probabilidades de vida de su hermano eran muy bajas; y tiempo después Juan Carlos falleció a causa de la gravedad de las heridas.
Gracias a la rapidez de la denuncia, la Policía Distrital pudo dar con 3 de los responsables, entre los que figura una mujer y los dos hombres que se movilizaron en una motocicleta gris, quienes fueron capturados en el barrio Gustavo Restrepo.
