El gobierno del presidente Petro ha sido muy claro en la necesidad de hacer una transición energética, teniendo a la reforma tributaria como una vía para consolidar ese proyecto.
Algo que todos los colombianos tienen muy claro con respecto a la dirección económica que quiere tener el actual gobierno, es la importancia que tendrá la reforma tributaria en Colombia respecto al sector de hidrocarburos, pues durante las pasadas elecciones fue algo que terminó creando una polarización notable entre la población.
El gobierno del presidente Gustavo Petro, ha dejado claro desde que asumió el poder que tendrá una flexibilización en sus impuestos en ese sector, pues según las palabras del propio mandatario, se modificó la tributación del sector de hidrocarburos, “que trabaja con bienes públicos, de propiedad de la nación: el petróleo y el carbón”.
La reforma tributaria mantiene que las regalías en el sector minero no serán deducibles del impuesto de renta.“En esa medida, la Nación, cuando concede su explotación económica por un particular, tiene el derecho a unas regalías y, por tanto, estas no son parte de la contabilidad de las empresas privadas y no son entonces deducibles de su impuesto de renta”, declaró el presidente Petro.
Algo que sí se ajustará en la reforma tributaria serán los impuestos a petroleras y carboneras que operan en Colombia. Sobre ese tema, el presidente Petro afirmó que las empresas de estos sectores dependerá del precio internacional de las materias primas y que la fórmula se aplicará con tarifas de 5 %, 10 % o 15 %, aunque no entregó mayores detalles de cómo se aplicaría.
No obstante, el jefe de Estado dejó en claro que el impuesto máximo se aplicará cuando se registren precios del petróleo superiores al promedio de los últimos 20 años. Respecto al carbón, Petro indicó que habrá una tasa diferencial, ya que “sus costos de producción son diferentes”.
