En respuesta a las cientos de vallas que se han instalado en el país en defensa del expresidente Uribe, varios detractores respondieron de la misma manera.
La detención domiciliaria del expresidente Álvaro Uribe Vélez sigue siendo un tema central dentro de la actualidad política del país y que refuerza la polarización latente entre la sociedad colombiana, por eso cualquier manifestación en apoyo o rechazo al exmandatario, como lo han sido las vallas publicitarias referentes a su libertad sigue causando un gran interés mediático.
Sin embargo, aunque los mensajes puestos en varias partes del país han causado fuertes debates sobre si debe ser permitido ese tipo de defensa contra alguien que sigue bajo investigación, en Barrancabermeja el debate se dio de forma puesta, pues un grupo de personas respondió de la misma forma al levantar una valla con mensajes en contra de Uribe y defendiendo su detención domiciliaria.
Adaptando la famosa ilustración “¿Quien dio la orden?”, la valla instalada en Barrancabermeja muestra al expresidente Uribe en la fotografía que se le tomó recién fue puesto con prisión domiciliaria, compartiendo su número de preso y afirmando que la razón por la que está detenido no se da por algún tipo de persecución política sino que es resultado de sus acciones.
Igualmente, el cartel causó un fuerte rechazo entre seguidores del exmandatario debido a la mención hecha sobre el supuesto soborno por el que es actualmente investigado pero que sigue siendo tema de investigación. Sumado a la mención del número y los cargos en su contra, la imagen mantiene la silueta original de los militares, otro aspecto que también fue mal recibido por el uribismo.
“Sabemos quién dio la orden. Y en Barrancabermeja exigimos justicia”, advierte el enorme cartel, que terminó haciendo que el nombre del municipio fuera tendencia en Twitter durante varias horas, en un fuerte debate sobre si el mensaje representa el sentir local o se usó de forma irresponsable para generalizar.
Pese a la polémica, muchos barranqueños apoyaron el mensaje y explicaron que el municipio no es tierra uribista, que por el contrario ha sido un lugar víctima de las políticas impulsadas por el expresidente y sus movimientos políticos, defendiendo la instalación de la valla y el contenido de la misma.