El caso de abuso sexual realizado por varios miembros de la fuerza pública que tiene indignado a todo el país sigue revelando datos importantes del actuar criminal de los uniformados.
Tras ser conocida la historia de la niña indígena que fue abusada sexualmente por 7 miembros del Ejército Nacional, las acciones por parte de la Fiscalía General de la Nación se han puesto en marcha, donde en lo que lleva de su investigación ha determinado que un miembro del Ejército Nacional intentó contactarse con la niña para que esta no contara lo sucedido a las autoridades.
Según información publicada por Noticias Caracol sobre los testimonios conseguidos por la Fiscalía, un soldado intentó contactarse con una de las hermanas de la menor que fue violentada por el grupo de soldados. El soldado intentó ofrecerle dinero a la mujer para que ni su hermana ni el resto de su familia pusiera la denuncia del caso.
Sin embargo, según detalla la fiscalía tras conocerse el hecho el hombre ha sido vinculado a la investigación de los 7 militares acusados del abuso contra la niña, siendo 8 los uniformados dentro del caso como se registró en un principio, aunque sin tener claridad si el octavo hombre también participó en la violación o solo intentó sobornar a la familia, ya que la menor afirmó haber sido emboscada por 7 soldados.
La investigación realizada también revela que la edad de los soldados implicados está entre los 18 y los 22 años, y que al parecer se encuentran recluidos en el batallón de San Mateo, de Pereira, mientras avanza su caso y las autoridades decidan cómo proceder ante el aberrante caso.
Mientras tanto, el gobernador mayor de la comunidad indígena Embera Chamí, al que pertenece la niña y su familia, pido a la justicia colombiana que además de que los hombres sean juzgados por los órganos de control también puedan ser sometidos a juicio por sus leyes nativas al haber lastimado a una miembro de su tribu.
