Pese a que el deseo de la mayoría de colombianos es que los parlamentarios dejen de gozar de un salario tan alto y de otras ventajas, la posibilidad de que se materialice aún es muy lejana.
El Pacto Histórico, partido de gobierno encabezado por los senadores Roy Barreras, Gustavo Bolívar, e Iván Cepeda presentaron este miércoles la reforma constitucional para hacer un cambio radical en varios aspectos laborales de los congresistas, una de las propuestas que viene exigiendo la mayor parte de la población desde hace varios años.
Se trata de una reforma que se viene esperando con mucha expectativa, pues hay que recordar que el Senado es una de las instituciones con mayor desaprobación por parte de los colombianos y que de la cual la mayoría de gente piensa que son funcionarios que gozan de un salario muy elevado, que se suma a unas vacaciones muy largas y otro tipo de beneficios que muestran la desigualdad entre los parlamentarios con la gente del común.
Entre los puntos que se encuentran dentro de la lista de modificaciones para el Congreso, algunas están relacionadas con la pérdida de investidura, buscando castigar faltas por parte de los parlamentarios como la inasistencia, la corrupción, las vacaciones, los sueldos y los limitar los períodos consecutivos de reelección, algo que muchos sectores sociales vienen denunciando ya que muchos congresistas pueden repetir su curul por decenas de periodos.
Cepeda, por ejemplo, señaló que “si se comprueba que el congresista ha actuado o dejado de actuar en cualquier escenario en que se toman decisiones a cambio de una contraprestación, es decir el dinero, contratos u otras formas de dádiva, efectivamente eso da lugar a pérdida investidura. Es en este contexto preciso estamos señalando la causal de pérdida investidura”.
Cabe recordar que los sueldos de los congresistas en Colombia son unos de los más altos del planeta, pues tan solo en sudamérica apenas es superado por lo que gana un congresista de Chile. El parlamentario colombiano gana mensualmente 37 salarios mensuales legales vigentes, por lo que la reforma pide que se baje a 25 salarios mensuales, que aún así es bastante elevado.
“La ciudadanía está esperando que esto sea de inmediata ejecución (pero) siempre ha fracasado porque los congresistas tienen la artimaña de no legislar en causa propia; esto es, yo no me puedo subir el salario ni me lo puedo bajar y se retiran y hacen todas las triquiñuelas”, contó Gustavo Bolivar, dejando claro que el proyecto tomará bastante tiempo y que sus votantes deben ser comprensivos ya que es un proyecto bastante difícil de realizar.
