La isla continúa en su proceso de reconstrucción tras el paso del huracán Iota, por lo que el suministro de energía eléctrica era una de las prioridades del Gobierno Nacional.
En medio de la emergencia social en la que se mantiene la isla de Providencia, luego de sufrir el paso del huracán Iota en el mes de diciembre, la Superintendencia de Servicios Públicos determinó, tras varias inspecciones y verificaciones, el buen ritmo que llevan las obras de reconstrucción en la infraestructura de los servicios fundamentales, especialmente de la energía eléctrica.
Durante la revisión hecha por la entidad en la isla, se verificó el correcto funcionamiento del suministro de energía tras los esfuerzos de los contratistas en recuperar y restablecer la infraestructura energética, así como la instalación de los circuitos de media tensión que tuvieron que ser restablecidos tras los fuertes vientos.
“El tendido eléctrico se encuentra restaurado en un 95%. Actualmente, la facturación del servicio está suspendida y se proyecta reiniciarla después del primer trimestre del año”, explicó el organismo de vigilancia en sus declaraciones sobre el estado de las islas y el avance de las obras.
De la misma forma, la Superintendencia contó cómo tanto en Providencia como en San Andrés y Santa Catalina, las obras de reconstrucción de los servicios de agua, aseo, alcantarillado y gas, siguen avanzando positivamente y resaltó el trabajo hasta el momento: “el proceso de cloración se realiza en plantas portátiles dispuestas por Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres”.
Respecto al suministro de gas, la Superservicios comentó como el suministro de este servicio está garantizado en los depósitos de Provigas, donde al parecer contarían con la cantidad suficiente de Gas Licuado de Petróleo (GLP), o más conocido como gas en cilindros, para poder cubrir las necesidades de los habitantes y trabajadores.
Por último, sobre los problemas en temas de aseo, la entidad explicó cómo Blue Lizzard, lugar que fue puesto a disposición para la ubicación de los residuos sólidos, está siendo usado como botadero a cielo abierto, razón por la cual se pidió la intervención de la administración local para evitar esa práctica y así evitar el cierre completo de la zona.
