El presidente electo de los colombianos publicó un mensaje en donde confirmó su encuentro con el expresidente y lo positivo que es para el país crear vínculos para unir al país.
Pese al tenso clima político que se vive en el país por la victoria de Gustavo Petro en las pasadas elecciones, un hecho sin precedentes ocurrió hace un par de horas, luego que el expresidente Alvaro Uribe Vélez, principal crítico del presidente electo, aceptó la invitación que se le hizo con la idea de tener un diálogo entre distintas partes de la sociedad colombiana para encontrar un camino de unidad.
Quienes son considerados como las dos figuras más destacadas de la izquierda y la derecha en Colombia han cruzado entre ellos trinos de manera amable y que dejan clara su intención de llegar a la concertación, la cual durante años, ha sido esquiva por ambas partes y que por primera vez parece que el ambiente luce auspicioso no solo para la tregua entre ambos políticos sino para que el país consiga una vía hacia la paz.
Muy temprano, el expresidente Uribe publicó un mensaje desde su cuenta de Twitter en el que aceptó asistir a la reunión que convocó Petro para que varios sectores acudan con el fin de buscar puntos de encuentro en las diferentes visiones del país. “Agradezco la invitación del presidente Gustavo Petro. Acudiré a la reunión en representación del Centro Democrático. Son visiones diferentes sobre la misma patria”, publicó el expresidente Uribe.
Luego del mensaje publicado por Uribe, no pasaron muchos minutos para que el presidente electo respondiera con un agradecimiento. “Bienvenidos a la era del diálogo que es la base de toda humanidad.Agradezco la respuesta positiva del expresidente Uribe y estoy seguro que Colombia agradecerá el que encontremos puntos comunes para una Patria común”, fue el mensaje de Petro.
A esa misma reunión también acudirá el presidente Iván Duque, quien junto con su equipo de empalme buscará dejar claro las cuentas del país, los proyectos que están vigentes y las labores desempeñadas durante los últimos 4 años, con la idea de lograr una transición tranquila y sin contratiempos.
