La noticia fue confirmada por el ministro de Defensa, Diego Molano, quien aseguró que la actividad ilegal de los alzados en armas hizo que el operativo fuera completamente necesario.
El conflicto armado en Colombia continúa igual de beligerante, por lo que el Ejército Nacional tuvo que actuar en contra de la estructura de ‘Gentil Duarte’. Lo ocurrido fue confirmado y narrado por el ministro de Defensa, Diego Molano, quien, en entrevista con La W, contó que la Fuerza Pública de Calamar, municipio ubicado en el departamento del Guaviare, realizó un bombardeo el pasado 2 de marzo contra los alzados en armas.
“El bombardeo fue contra la estructura narcoterrorista de ‘Gentil Duarte’ que ha ejecutado más de 45 acciones contra la población civil y 106 contra la fuerza pública (…) se trató del campamento de una organización que puede poner en riesgo a la sociedad colombiana. Uno no puede creer que aquí había una escuela de formación, se trataba de un campamento terrorista”, señaló Molano a los periodistas de la emisora.
Lo ocurrido ha estado rodeado por un halo de dudas y desconfianza de muchas personas, ante la legalidad de un bombardeo en una zona cercana al casco urbano de la población, a lo que el ministro Molano contó cómo el operativo militar que fue ejecutado por la fuerza pública está cobijada por el Derecho Internacional Humanitario y es completamente legítima, advirtiendo que muchas de las críticas recibidas se hacen con el afán de deslegitimar a los uniformados y a toda la institución.
Una polémica que rodea al bombardeo está relacionada con la presencia de menores de edad en el campamento atacado, reportado por el senador Roy Barreras y el periodista Hollman Morris. Sobre los supuestos menores que habrían fallecido, Barreras aclaró, en su cuenta de Twitter, que uno de los supuestos menores ya era mayor de edad, por lo que afirmó que se requiere de una mayor verificación para evitar que se divulgue información falsa.
Mientras continúan las investigaciones sobre la edad de las víctimas, el ministro Molano se refirió a la presunta presencia de menores de edad, asegurando que esas estructuras se encargan de “transformar a los jóvenes en máquinas de guerra”, formándolos en tareas guerreristas en contra de la población civil y de la fuerza pública. “Los entrenan durante mucho tiempo, los deshumanizan. Por eso, lo que tiene que hacer nuestra fuerza es desmantelar esas estructuras”, afirmó Molano para La W.