El panorama de los habitantes de Buenaventura es cada vez más oscuro, pues, además de la violencia y el creciente número de contagios por Covid-19, la posibilidad de agua potable es cada vez más lejana.
Las declaraciones del Viceministro de Agua, José Luis Acero, han creado gran preocupación tanto para los habitantes de Buenaventura como para el resto del país, en materia de cómo el Gobierno está trabajando en las regiones, pues el funcionario reconoció que antes de 2024 la posibilidad de que los bonaverenses puedan acceder al derecho de un servicio eficiente y completo de agua potable es poco probable.
Irónicamente, pese a ser estar ubicada en uno de las regiones más húmedas del país, donde se registran lluvias durante casi todo el año, además de ser el sitio de paso de billones de pesos a causa de su puerto, la gente de Buenaventura sigue sufriendo al no contar con un sistema de acueducto y alcantarillado funcional.
Gran parte del problema se debe al contrato que firmado con la empresa privada Hidropacífico por más de 20 años, encargada del suministro de agua a la ciudad de casi 450 mil habitantes, y que pese a haber pasado 18 años desde que la empresa asumió la responsabilidad aún siguen sin contar con un suministro completo. Pese a que en 2017 la entonces gobernadora de Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, afirmó la salida de la empresa nada sucedió, por lo que se tendrá que esperar hasta que el contrato termine el 31 de diciembre de 2021.
Según las declaraciones de Acero, la continuidad del agua en Buenaventura “va en aumento”, explicando que los habitantes tienen acceso de 5 a 7 horas al día, además que existen obras que ya están siendo ejecutadas para mejorar el servicio. Sin embargo, reconoció que la idea de que el servicio esté disponible las 24 horas durante toda la semana no será posible a corto plazo.