Los vecinos del lugar tomaron la iniciativa luego de ver el resultado de las protestas y las fuertes críticas contra los uniformados.
Mientras Bogotá permanece a la intriga sobre la forma en que terminara los constantes altercados entre la Policía Nacional y la ciudadanía, un grupo de residentes del barrio El Código en la localidad de Usaquén (al norte de la ciudad) decidieron darle la espalda a las protestas y mostraron su interés en reinvindicar la posición de los miembros de la fuerza pública.
Los vecinos del lugar no solo tomaron la iniciativa de limpiar y arreglar la vandalizada estación, sino que además aportaron mano de obra y hasta hicieron una colecta para la compra de todos los materiales para dejar el el CAI en perfecto estado.
Según un informe hecho por Noticias Caracol, los vecinos lograron comprar con el dinero recolectado varios litros de pintura, instalaciones eléctricas y demás tipo de materiales con los que lograron hacer la reconstrucción completa del lugar en el corto plazo de 4 días luego de haber anunciado la colecta y con el que esperan dar una muestra de respeto a los uniformados y a toda la institución.
“La Policía nos brinda apoyo y seguridad. No veo la necesidad de atacarlos ni de destruir cosas que son patrimonio. No podemos seguir en estas discordias. Unos cuantos han dañado a la Policía, pero eso va a cambiar”, comentó Jhon Sáenz, uno de los residentes del barrio ‘El Codito’, quien participó en la reconstrucción y que contó al noticiero la forma en que cada vecino puso de su parte.a ese noticiero Jhon Sáenz, residente de El Codito.
Mientras los voluntarios de la iniciativa permanecen haciendo guardia a través de turnos para evitar un nuevo ataque contra la estructura, muchas personas critican la actitud de los habitantes del sector por no apoyar las protestas que se dieron inicialmente por el brutal aquel que sufrió Javier Ordóñez y que revivió el debate sobre los límites que deben tener los policías dependiendo del procedimiento.