Un representante de la Federación afirmó que existen más de 220 denuncias por estafa, las cuales estarían siendo realizadas aprovechándose del nombre de la entidad y el de sus dirigentes.
Crece la preocupación al interior de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, todo producto a una serie de denuncias que han recibido en los últimos años debido a que en todo el país se han presentando por lo menos 223 denuncias por estafa a comerciantes y que se estarían logrando gracias al uso indebido del nombre de la entidad, el cual sirve para convencer y no levantar sospechas para quienes terminan aceptando órdenes de compra de maquinaria e insumos.
Así lo advirtió el gerente general de la entidad, Roberto Vélez Vallejo, quien describió como ese tipo de denuncias se vienen dando desde el año 2018, comentando cómo los delincuentes estarían usando el nombre de la federación y de asociaciones locales para realizar sus fraudes contra los comerciantes y productores de café.
“En el año 2018 empezamos a recibir la información sobre unas supuestas compras en distintas partes del país, que se realizaron a nombre tanto de la Federación como de los diferentes Comités regionales de cafeteros, las cuales lamentablemente no son reales y los comerciantes han sido estafados (…) Hasta el momento ya tenemos información de por lo menos 223 casos similares y estamos preocupados, sin embargo ya todo está en manos de las autoridades respectivas”, declaró Vallejo.
De igual forma, el directivo de la entidad cafetera afirmó que la modalidad que suelen aplicar con mayor frecuencia los estafadores es la de acudir a ferreterías o almacenes de suministros para realizar compras de alto valor a nombre de la federación cafetera, a lo que los vendedores terminan accediendo y que no hay quien les responda por la mercancía perdida.
“Llegan casi siempre a ferreterías y les dicen a los propietarios que esa compra es a nombre o de la Federación de alguno de los Comités, por ende la gente cae muy fácilmente pues todo parece muy legal e incluso van y recogen la mercancía y el problema es cuando van a cobrarnos y tenemos que decirles que lamentablemente no es una orden real”, sentenció el funcionario, pidiendo a los comerciantes mayor control en las compras y denunciar a los responsables si logran contar con información relevante.
