Las emprendedoras afirman que el dirigente del plantel deportivo lleva 10 meses incumpliendo los plazos de pago acordados.
El club de fútbol profesional colombiano Boyacá Chicó, sigue estando en el ojo del huracán por las acciones y declaraciones hechas por su principal accionista, el empresario Eduardo Pimentel, quien fue acusado por un grupo de empresarias de estar en mora por 25 millones de pesos y mostrando poca voluntad de querer pagar.
Según las declaraciones hechas por las mujeres, el dirigente del club de fútbol las contrató para confeccionar toda la línea deportiva del club para el 2020, cuyo costo dio un total de 25 millones de pesos, de los que, hasta el sol de hoy, no han visto un solo peso.
Ante la situación que enfrentan, las mujeres decidieron acudir hasta las afueras del estadio La Independencia donde juega el equipo, y bloquear el bus del Boyacá Chicó como forma de protesta, ante el incumplimiento del pago que amenaza con acabar su empresa.
Según contó Diana Rojas, una de las representantes de la empresa Cuality Sports, el funcionario Pimentel se ha negado a pagar los 25 millones que debe desde hace 10 meses, tomando actitudes groseras con las trabajadoras, al tiempo que hace gala de ser una persona pudiente en redes sociales con sus comentarios.
“Solo vienen a robar a la gente honesta. El señor Pimentel se la pasa insultandonos y diciéndonos que eso le pasa por contratar colombianos de media. Sin embargo, nos pide plazos para pagar porque, según él, no tiene plata”, comentó la empresaria.
Adicionalmente, Rojas explicó los efectos que ha causado la deuda que Pimentel les ha generado, al punto de tener que despedir a varias de sus empleadas por la falta de ingresos, al igual que tener que sacar un préstamo para poder continuar con las operaciones de la empresa y no quedar en la quiebra.