Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Congreso da luz verde al transfuguismo: congresistas podrían cambiar de partido sin perder su curul

La Cámara de Representantes dio luz verde, en primera vuelta, al polémico proyecto que permite a congresistas cambiar de partido durante el cuatrienio sin sanciones. La discusión definitiva se dará en 2025.

¿En qué consiste la propuesta aprobada en la Cámara?

La Cámara de Representantes aprobó en primera vuelta, con 84 votos a favor, el proyecto que reviviría el transfuguismo, una medida que permitirá a los congresistas cambiar de partido sin riesgo de perder su curul. La propuesta, respaldada por figuras del Pacto Histórico, la oposición y partidos tradicionales, ha generado fuertes debates.

El articulado propone que, por una única vez durante el cuatrienio, los congresistas puedan renunciar a la colectividad que los eligió y unirse a otra, siempre y cuando lo hagan hasta un mes antes del proceso de inscripción de candidatos para las siguientes elecciones.

Actualmente, las reglas prohíben a los miembros de corporaciones públicas —incluidos concejales y diputados— cambiar de partido sin renunciar al menos un año antes del inicio de dicho proceso electoral. De lo contrario, podrían incurrir en doble militancia y perder su curul.

La representante Marelen Castillo, promotora del proyecto, defendió la medida afirmando que busca que los políticos se puedan “identificar realmente con los valores y principios” de su nueva colectividad. Castillo, por ejemplo, evalúa cómo salir de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, partido que la llevó al Congreso como fórmula del fallecido excandidato Rodolfo Hernández.

Además, otro artículo del proyecto indica que los partidos o movimientos políticos que se presenten en coalición y superen juntos el umbral electoral deberán consolidarse en una sola colectividad, a la que se le mantendrá la personería jurídica. Este punto resulta clave para el Pacto Histórico, que planea consolidarse como un bloque progresista fuerte de cara a las elecciones de 2026.

La discusión final de este proyecto de acto legislativo se llevará a cabo en febrero o marzo de 2025, cuando se definirán otros puntos sensibles como el voto obligatorio.