Los organismos de salud en la la isla vienen denunciando la situación precaria que viven desde hace meses, a la cual se le suman complicaciones por las reiteradas lluvias.
La isla de San Andrés sigue reclamando la ayuda del Gobierno Nacional ante las complicaciones que han tenido durante todo el año a causa de la pandemia, la cual fuera del impacto económico sigue teniendo repercusión en la salud de los isleños, problema que se agudiza ante las carencias con las que cuentan los centros de salud y que con el inicio de la temporada de lluvias complica se vuelve más preocupante.
Desde la isla advierten cómo el Hospital de San Andrés Claren Lynd Newball, el centro médico más importante de la región, no cuenta con los elementos ni el personal suficiente para afrontar los desafíos que supone la pandemia, al solo contar con 9 UCI para atender los más de mil infectados por coronavirus que siguen esperando una atención oportuna.
No bastando los problemas con los que cuenta los trabajadores del centro de salud, la intensidad de la lluvia en los últimos días ha generado inundaciones en el hospital, afectando varios equipos médicos, camas, paredes y demás; en consecuencia, se han inhabilitado varios sectores del edificio, entre ellas las pocas UCI con las que cuentan.
“Los consultorios, salas especializadas, zonas de archivo y los pasillos se inundaron. El agua escurría por las paredes, techos y aires acondicionados, con el riesgo adicional por el contacto con cables de energía”, advirtió la Procuraduría General de la Nación, al tiempo que se exige al Ministerio de Salud y a la Gobernación de San Andrés “acciones urgentes, que garanticen la salud de más de 79 mil residentes y visitantes”.
La Procuraduría explicó en su pedido que se requiere una intervención oportuna del Gobierno para contener la crisis, pues en los últimos 30 días el número de infectados de la isla se disparó de forma sumamente preocupante, de 172 a 1.336 infectados junto con 4 víctimas mortales por el virus.
“El departamento solo cuenta con 13 camas UCI, 9 de las cuales están destinadas para la atención positivos para coronavirus, y 4 para otras patologías”, señaló el Ministerio Público, afirmando además que, teniendo en cuenta que la reapertura de vuelos comerciales y la llegada de turistas, es más que probable que se sature la capacidad del hospital, el cual ya se tiene una tasa de ocupación de más del 50%.